La lluvia no impedía subir la Virgen de la Corona a su ermita en Almudévar
Tras la rompida de la hora y la exaltación del tambor, Almudévar acogía este Domingo de Resurrección de la Semana Santa la subida de la Virgen de la Corona a su ermita, que ha sido restaurada en las últimas semanas y cuyas obras inaugurará Julián Ruiz, Obispo de Huesca, el día de San Jorge. A pesar de la lluvia los fieles no faltaban a esta cita con la Virgen de la Corona para volverla a subir a su ermita.
Se desarrollaba en el marco del Rosario de la Aurora a las 8:30 de la mañana. La peana era portada por cofrades del Rosario y cofrades de la Soledad.
El recorrido era el mismo que se realiza en el Rosario de la Aurora el día de la Inmaculada: el trayecto comenzaba en la Iglesia parroquial, seguía por la calle Mayor, plaza de España y por la cuesta de la Virgen hasta llegar a la citada ermita.
El próximo 23 de abril, festividad de San Jorge, se procederá a la bendición del columbario de la Virgen de la Corona, instalado en la ermita de dicha Virgen, y a la inauguración oficial de las obras acometidas en las fases I y II. Será a las 19.00 horas y lo presidirá el Obispo de Huesca, Julián Ruiz Martorell.
Actuaciones acometidas
En la primera fase, se han restaurado los tejados y reparado las goteras de la sacristía y de la bóveda de la iglesia. Además se han arreglado los muros del interior de la sacristía y se ha dividido este habitáculo para hacer el columbario y una zona de servicio con W.C. adaptado. También se ha cambiado la instalación eléctrica y el suelo, colocando uno nuevo sobre cámara ventilada.
Por otra parte, en la segunda fase, se han acondicionado las zonas deterioradas por las goteras en molduras, paredes e imágenes del área del presbiterio (bóveda y linterna). También se ha aprovechado para pintar esa misma zona. Además, se ha llevado a cabo la adecuación del suelo del Altar, sustituyendo el de madera por uno de mármol. La iluminación ha sido otra de las mejoras que se han realizado y que permitirán contar con mayor luminosidad en el presbiterio, el altar, el retablo y el camarín de la Virgen. Por último, se ha restaurado, de forma parcial, el Retablo Mayor de la Virgen, especialmente sus columnas y grupos escultóricos.