A la espera de conocer la autoría del ataque a un rebaño en Tardienta

Esta mañana, cuando Pedro Pérez, propietario de una explotación ganadera en Tardienta acudía a ver su rebaño, se encontraba con cuatro ovejas y una cabrita muertas. Los animales presentaban heridas en el cuello y dos de ellas parcialmente devoradas. El ganadero, siguiendo los protocolos establecidos, daba aviso a los técnicos del Gobierno de Aragón que acudían para retirar los cadáveres y trasladarlos al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de La Alfranca para serles practicada la necropsia y así determinar la autoría del ataque.

Pedro Pérez, comenta lo sucedido

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El desánimo del ganadero tardientano, propietario de un rebaño de 600 reses, controladas por un pastor eléctrico, es latente. Además de los cinco animales muertos, habrá que esperar a lo que suceda con el resto del ganado, "pues muchas de ellas están apunto de parir y seguro que el estrés les habrá afectado", asegura el ganadero. Se da la circunstancia de ser este el primer ataque al ganado que se produce en la localidad. Hasta ahora, se habían producido en las inmediaciones de la Sierra de Alcubierre, especialmente en Leciñena, cuyo término municipal linda con el de Tardienta.

Pérez confiesa sentirse muy desanimado.

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Este miércoles está prevista una reunión entre el presidente de la Diputación Provincial de Huesca, Miguel Gracia, y representantes del sector ganadero altoaragonés, plataformas contra el lobo y sindicatos agrarios, para abordar la problemática derivada de los continuos ataques al ganado.