La gran nevada, beneficiosa para el campo pero un problema para la ganadería

La elevada cantidad de nieve que ha caído este pasado fin de semana tiene consecuencias muy dispares en el mundo del campo. En la agricultura, para cultivos como el cereal, los frutales, el arbolado o la viña, la nieve y el frío van muy bien para ralentizar el crecimiento y mejorar su desarrollo. Sin embargo, las infraestructuras se pueden ver dañadas con las grandes heladas, y en la ganadería, tanto intensiva como extensivas, hay problemas para el aporte de comida, la accesibilidad a las parideras

José Fernando Luna, presidente provincial ASAJA, indicaba lo positivo de la nevada, que pasa también por acuíferos y embalses que se van a llenar si la nieve se funde. Además, para los cultivos, la nieve es muy buena: acaba con las plagas y favorece el desarrollo. De hecho, para el campo este frío es ideal, necesario para el parón vegetativo del árbol o de la cosecha de cereal, de manera que se retrase el desarrollo o la floración, y no lo dañen heladas tardías al final del invierno o en la primavera.

Sin embargo, las fuertes heladas pueden ser muy perjudiciales para las estructuras de granjas y sistemas de riego. Puede ser que si quedaba alguna canalización de hormigón llena de agua ,se ha podido helar y resquebrajar, al igual que en las tuberías o en las bombas del riego por aspersión que deberían haber quedado vacías; si no, con temperaturas bajo cero pueden resquebrajarse o reventar.

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Sí que causa preocupación la ganadería. La extensiva no puede pastar en el campo, por lo que hay que aportar comida en pesebre, lo que supone para el ganadero mayor gasto del que puede, con la mala situación de rendimientos que tiene. La accesibilidad a paridera para ganaderos o pastores también es difícil, más aún si tiene que llegar un camión. Y también llevar el agua.

Y en lo que respecta a la ganadería intensiva, el acceso para el ganadero también es difícil, al igual que para mercancías, como pienso, abastecimiento de agua o para cargar o descargar animales.

Si la nieve se deshace con lluvia será muy bienvenida, pero si se hiela, gran parte del agua se evaporará y no llegará a la tierra. Los pantanos están prácticamente llenos pero se necesita agua. Cuando se vaya esta manta de nieve habrá que ver cómo están los sembrados, y también cómo van evolucionando.

La gente del campo no olvida, en todo caso, el refrán "Año de nieves, año de bienes", y se encomienda a él.