Un cuarto premio llega a Robres y dos quintos a Jaca, Ayerbe y Fraga
Todos los premios han estado muy repartidos por todo el país en diferentes administraciones
La suerte también ha dejado varios pellizcos de suerte en varias localidades de la provincia de Huesca. El cuarto premio con el número 67.774 era vendido en el bar “Central” de Robres. Los quintos premios también han dejado alegrías en Jaca, Fraga y Ayerbe con los números 29.031 y 02.308.
Isidro vendía cuatro décimos de la lotería en Jaca
06:48
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/rha_42828/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
La localidad monegrina de Robres ha vendido por terminal parte del cuarto premio del 67.774. Por el momento se desconoce que cantidad de décimos que se han vendido.
Joaquín Bollíc, de la administración de Fraga donde se ha vendido parte del quinto de la Lotería de Navidad
00:51
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/rha_42829/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
María Ubieto, de la administración de Ayerbe quinto premio de la Lotería de Navidad de Ayerbe
00:37
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/rha_42830/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
El número 02.308, recaía en dos puntos de venta de Fraga y de Ayerbe.
El otro quinto premio, del 29.031, rozaba la localidad de Jaca. El estanco de calle Gil Berges, pizzería La Fontana, vendía por terminal cuatro décimos que resultaba muy repartido, vendido en hasta 100 administraciones. Este punto de Jaca vendía por lo tanto una cuantía total de premio de 24.000 euros.
Como curiosidad, en 2015, un cliente vasco pidió un número de terminal. Ese mismo décimo lo adquirió el dueño y otro cliente de Jaca y el dueño repartió posteriormente su propio décimo entre los trabajadores. La suerte por lo tanto no sonrió solo a Isidro sino a su empresa. Al final esos décimos recayeron en ocho personas.