Precaución en la montaña, también a la hora de ir a buscar setas

Con la llegada del otoño llegan también las setas y las numerosas personas que van en su búsqueda, con esta actividad, según la campaña Montaña Segura, se incrementan los rescates por extravíos y desorientaciones en la montaña que constituyen la principal problemática en zonas de media montaña en esta época del año.

Señalan que ir a por setas también es "salir a la montaña" y hay que tener en cuenta ciertos condicionantes como que hay menos horas de luz, hace más frío o la posibilidad de nieve y hielo, entre otras cuestiones.

Las personas que recolectan setas suelen desarrollar esta actividad fuera de los senderos, por ello en esta época son habituales los rescates por extravío; un socorro en montaña que puede llegar a ser muy complicado de resolver, por ello tomar unas precauciones básicas pueden marcar la diferencia.

Los seteros que se extravían no suelen poder dar una localización de dónde se encuentran, porque no saben dónde están. El objetivo es encontrar setas y a ello se pone toda la atención, recorriendo el bosque fuera de trazas de sendas o caminos. Los rescates por extravío suelen terminar con la localización de las personas en buen estado, quizás algo cansada o con frío (a partir de septiembre las temperaturas mínimas tienden a bajar cada vez más). Pero debemos apelar a la responsabilidad de cada uno para garantizar un día de campo sin necesidad de activar los servicios del 112.

Entre las principales recomendaciones destacan la buena planificación del recorrido, indicar a alguien la zona en la que se va a ir a buscar, el vehículo con el que se acude y la hora de regreso prevista. Un buen mapa de la zona, actual y con detalle de pistas y caminos puede ser de gran ayuda.

También establecer unos límites identificables sobre el terreno, llevar el teléfono cargado, una linterna o un silbato también pueden ser de gran ayuda. Se recomienda asimismo llevar ropa de abrigo adecuada, preferiblemente de colores vivos, impermeable y botas de montaña, sin olvidar comida o agua. Mejor no salir solo a la montaña, ni apurar el horario de regreso y terminar unas dos horas antes de que anochezca.

Si aún con estas recomendaciones algo no sale bien y es necesario llamar a los grupos de rescate, hay que intentar enviar las coordenadas de la posición a través del teléfono móvil. De esta manera se agilizará la localización.