Situación más favorable que hace unas semanas, pero no hay que bajar la guardia

La situación mejora, así lo dicen los responsables de la sanidad aragonesa, es más favorable que hace unas semanas, pero aun así se sigue haciendo un llamamiento a la responsabilidad ciudadana en un momento en el que la apertura de varias actividades y de mayor contacto social va a provocar que se produzcan nuevos contagios.

La percepción de casos nuevos está más contralada y los episodios de mortalidad están en unas cifras más contenidas que en los últimos días, por lo que se entra en un nuevo modelo de control de la pandemia, regresando a la situación inicial de cuando empezó todo hace dos meses, según ha explicado, Francisco Javier Falo, director general de Salud Pública.

La tendencia actual es a la baja, con entre 15 y 25 positivos de manera diaria en todo Aragón pero, consideran los responsables sanitarios, que se pueden producir repuntes por varias causas, en primer lugar por el mayor contacto social que hay en la actualidad, y en segundo, porque hay mayor capacidad de detección en la actualidad. El objetivo a través de diferentes medidas es que esos aumentas sean moderados y se pueda responder a ellos con rapidez.

La atención primaria va a jugar un papel importante a partir de ahora en la detección y actuación ante nuevos casos. Para seguir reforzando el sistema sanitario, Aragón va a contratar más personal, más de un centenar de médicos y enfermeras, añadiendo profesionales que terminan su residencia, con un coste superior a los seis millones de euros, según Javier Marión, director gerente del servicio aragonés de salud.

En cuanto a la desescalada se está trabajando, según señalan los responsables sanitarios, en que toda la comunidad autónoma pase a la fase 2 a partir de la próxima semana, para lo que se está entregando toda la documentación pertinente al Gobierno central. Siguen favorables a que el medio rural pudiera tener más flexibilidad ante una posible llegada a la nueva normalidad.