La Morisma de Aínsa se aplaza a 2021

La representación de la Morisma de Aínsa, en su 50 aniversario, se aplazará a 2021. Una decisión que tomaba la Junta Directiva de la Asociación Cultural la Morisma con la unanimidad de los votos de todos sus socios en un ejercicio de coherencia y responsabilidad.

La presidenta de la Asociación Cultural la Morisma es Isabel Bergua. ENTRA CORTE MORISMA APLAZAMIENTO 1

La presidenta de la asociación, Isabel Bergua, entiende que es lo más razonable en estos momentos teniendo en cuenta que se trata de una representación que congrega a más de 500 actores que participan en la propia recreación y a más de 2.000 personas que acuden como público. “Es muy difícil mantener la distancia de seguridad en la propia recreación y además habría que hacerlo con mascarilla. Por ello hemos preferido aplazar este año la recreación y que vuelva a realizarse los años impares”.

La presidenta de la Asociación Cultural la Morisma es Isabel Bergua. ENTRA CORTE MORISMA APLAZAMIENTO 2

“Como asociación no queremos tampoco correr riesgos innecesarios”, argumenta Bergua que remarca que esta decisión se tomaba tras trasladar el tema a todos los socios “para que fuera una decisión unánime”.

En cuanto al resto de actos conmemorativos de los 50 años de esta fiesta también se trasladarán al próximo año. Sí se tiene previsto dar a conocer un vídeo que se está preparando con las imágenes de las recreaciones que se han celebrado a lo largo de los años y cuya presentación podría llevarse a cabo a través de las redes sociales.

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Algo de historia…

La Morisma es un drama histórico que aborda la conquista de Aínsa por los cristianos en el siglo VIII. Según la tradición, la aparición de una Cruz en lo alto de una encina fue lo que alentó a las tropas cristianas y les hizo obtener un triunfo total sobre las tropas árabes.

Esta obra, de gran vistosidad, se celebraba desde siempre cada dos años coincidiendo con los años impares; el hecho obedecía simplemente a que cuando se recuperó la pieza a principios de los años 70 se decidió hacer la representación con una periodicidad bianual. Sin embargo, fue en el año 2003 cuando la fuerte lluvia caída unas horas antes del inicio de la puesta en escena, obligó a suspender la representación, y se acordó celebrarla el año siguiente rompiendo así la tradición de los años impares que ahora volverá a recuperarse.