Publicado el decreto por el que se declara BIC el yacimiento de Els Trocs

El Boletín Oficial de Aragón publica, este miércoles, el decreto con fecha 10 de marzo del GA por el que se declara el yacimiento arqueológico denominado la cueva de Els Trocs, ubicado en el municipio ribagorzano de Bisaurri, como bien de interés cultural, en la categoría de conjunto de interés cultural, zona arqueológica.

Los efectos de la declaración suponen, según lo dispuesto en la Ley de Patrimonio Cultural Aragonés, la obligación para el Ayuntamiento de redactar y aprobar Planes Especiales de Protección. Además, toda actividad o intervención arqueológica que se quiera realizar en la zona arqueológica declarada Bien de Interés Cultural y en el entorno deberá contar con autorización del director general responsable del Patrimonio Cultural.

Los resultados arqueológicos obtenidos en las siete campañas de excavación realizadas hasta el momento en la cueva de Els Trocs durante los años 2009, 2010, 2011, 2012, 2014, 2016 y 2019, han permitido que, desde el inicio de los trabajos en este yacimiento, la repercusión científica y mediática de su investigación haya trascendido el mero ámbito autonómico, para trasladarse al ámbito nacional e internacional, lo que ha permitido incluir este yacimiento en el debate que se viene desarrollando en los últimos años en diferentes escenarios peninsulares y europeos y que se relaciona con el proceso de cambio de las sociedades cazadoras-recolectoras a las productoras, concretando en este caso la problemática en la transición del mesolítico al neolítico en el valle del Ebro y la posterior expansión o colonización durante el Neolítico Antiguo de sus afluentes tanto hacia el sur como hacia el norte, destacando en este caso la temprana colonización del Alto Pirineo.

La trascendencia e interés científico, histórico y patrimonial de este hecho es extraordinariamente relevante, ya que demuestra que hace siete mil años, nuestros remotos antepasados neolíticos ya eran capaces de sustentar una economía ganadera basada en la gestión de los rebaños, combinando los pastos en las tierras bajas durante el invierno, para pasar a las tierras altas pirenaicas durante los meses de verano. Este tipo de gestión del ganado en una época tan temprana es la primera vez que se documenta en la Península Ibérica, de ahí su trascendencia histórica, científica y patrimonial.

La cueva de Els Trocs ha aportado tal cúmulo de información y nuevos datos sobre los modos de vida y la evolución de las primeras comunidades de pastores neolíticos que colonizaron el Pirineo, que se ha convertido por derecho propio en un yacimiento excepcional e imprescindible para estudiar los procesos de producción cerámica, la gestión de la cabaña ganadera durante la Prehistoria reciente, o la caracterización de dicha población a través de los estudios paleoantropológicos y genéticos en curso, de cuyos datos se han aportado ya estudios que han aportado conocimientos hasta el momento no dados por ningún otro yacimiento neolítico aragonés.