Borja García define su paso por el Huesca como "unas vacaciones largas"

El fichaje de Borja García ha sido sin duda una de las peores operaciones de la SD Huesca y no solo por lo económico, sino por la calidad humana que ha demostrado un jugador que en su llegada al Girona ha dejado claro que su paso por el club oscense fue un error. Con unas grandes condiciones futbolísticas da la impresión de que nunca tuvo ni el más mínimo interés por defender la camiseta y el escudo azulgrana y eso que se apostó por él con un traspaso de 1,5 millones de euros y una ficha que rondaba también el millón.

Borja definía en su presentación con el Girona su paso por el Huesca “como unas vacaciones largas” y confirmaba que en el mercado invernal intentó regresar al conjunto catalán. Solamente Míchel apostó por él y no le devolvió esa confianza con su juego y su falta de entusiasmo y ganas de aportar le relegaron con Pacheta a no tener minutos.

En Girona ha remarcado en varias ocasiones en la presentación que “solo quería ser feliz” y salir de la SD Huesca. Solamente dejaba un gesto de agradecimiento al club y a Rubén García por dejarle marchar, aunque haya supuesto una mala operación económica para la entidad oscense que no quería tener un “garbanzo negro” como Borja en el vestuario.

Vista la repercusión de sus declaraciones, por la tarde ha puntualizado sus palabras y señalaba en redes sociales que tal vez no había utilizado una expresión correcta y pedía disculpas a los seguidores azulgrana.

El futbolista madrileño es historia en la SD Huesca con el que marcó un gol en Granada que ni siquiera celebró y que prácticamente lo dice todo de su paso por el club azulgrana.