El Huesca ha vuelto a El Alcoraz 89 días después

El entrenamiento de este jueves de la Sociedad Deportiva Huesca ha sido muy especial puesto que ha supuesto el regreso del equipo a El Alcoraz, 89 días después desde la última vez que fue el 7 de marzo en el encuentro ante el Fuenlabrada. La sesión ha servido para ir adaptándose a jugar sin público y al horario de las 19,30 horas, que es el previsto para los dos primeros encuentros contra el Málaga y el Mirandés en el regreso de LaLiga.

Uno de los objetivo del cuadro técnico es cuidar todos los detalles al máximo, como decía Míchel, y es que el espejo de lo que se está viendo en Alemania es un buen ejemplo para ver detalles que pueden pasar desapercibidos, pero que pueden ser claves en los partidos que restan. El técnico azulgrana reconocía que en la liga alemana se ha visto como hay fallos que pueden estar motivados por la falta de concentración al tener que jugar sin aficionados en las gradas, entre otras cosas.

Míchel señalaba como una de las claves “la motivación es muy alta y tenemos que elevar el nivel de exigencia, porque jugar sin público te puede llevar a a tener fallos en la concentración. Es una competición totalmente distinta de once partidos, sin publico en unas condiciones un poco especiales”, indicaba.

Los horarios de los encuentros o el descanso entre partido y partido, son otros aspectos muy presentes en los preparativos. Queda una semana para debutar tras tres meses sin competir y con una preparación contra reloj después de una situación inesperada. Nunca se ha vivido tener que dejar de competir cuando quedan once partidos y tener que reanudarlos después de varios meses por lo que es una incógnita cómo se lo pueden tomar los futbolistas.

El Huesca sabe que tiene que hacerlo muy bien, entre otras cosas porque los dos primeros clasificados le llevan una diferencia de cinco y seis puntos. El comienzo puede ser clave y se prefiere empezar bien, aunque hay tiempo con 33 puntos en juego todavía.

Los oscenses están en el pelotón de los favoritos y todavía hay muchas cosas que decidirse en una Segunda División que se presume disputada hasta el último minuto del último encuentro.