Empate y oportunidad perdida ante el Barça

El Huesca empataba en un partido sin goles donde los azulgranas se van con la sensación que se podía haber ganado, dejando pasar la oportunidad ante un Barcelona con muchas bajas y que creo ocasiones pero sin mucha presión. Los locales aguantaron con su puerta a cero, si bien les fallaron las fuerzas para ir a por los tres puntos. Un empate ante el líder que en otras circunstancias se hubiera celebrado por todo lo alto, si bien ahora la necesidad hace que hay que hacerlo bueno el sábado que viene en Vallecas ante el Rayo.

Francisco apostó por jugar con defensa de cuatro y dar entrada a Juanpi y Ferreiro en las bandas con Enric y Chimy arriba. Quería frescura en el centro del campo y sobre todo opciones en ataque, aunque las cosas no salieron como se esperaba y no hubo oportunidades claras para los azulgrana.

Enfrente un Barcelona con solamente Ter Stegen como títular, de los que jugaron ante el Manchester. Se la jugó Valverde que hacía debutar a Riqui Puig, Wague y Todibo y dio oportunidad a jugadores que tienen pocos minutos. En ningún momento, a pesar de tener el dominio, dio sensación que el Barça tuviera comodidad en el campo. Es cierto que la mejor ocasión fue para Dembele, pero Santamaría estuvo acertadísimo y evitó el tanto.

Poco más pasó y los minutos fueron pasando y el marcador no se movería para finalizar con un empate a cero que al Barcelona no le significa nada más allá de dejarse dos puntos ante el colista, pero con la liga en el bolsillo, y al Huesca le sabe a poco por la necesidad que tiene en la clasificación.

Los cambios de Francisco no dieron mucho más y ni Melero, ni Cucho, ni Gallar pudieron cambiar el rumbo en la segunda mitad.

Lo positivo es que se está en la pelea, pero con 25 puntos y seis jornadas por delante el final del campeonato tiene que ser muy bueno, empezando por el choque con el Rayo que se convierte en una final decisiva al tratarse de uno de los rivales más directos en la lucha por la permanencia.