Míchel reconoce que los nervios le jugaron una mala pasada a su equipo

Se perdió en Soria ante el Numancia tras una buena primera mitad, donde faltó acierto, y en una segunda donde los azulgrana no supieron tener la paciencia suficiente para aguantar el empate y no precipitarse en muchas acciones que le llevaron a la derrota. Las faltas laterales cometidas fueron un quebradero de cabeza y es que el Huesca está encajando goles a balón parado y esa es una de las áreas de mejora.

El técnico reconocía que “hemos tenido una muy buena primera parte, pero con poco acierto, y cuando no aprovechas esas situaciones de ventaja, al final el rival tiene sus armas”. Para Míchel, “en la segunda parte nos hemos puesto demasiado nerviosos e incapaces de hacer una buena jugada. La idea es seguir trabajando en base a la primera parte, con dominio y control, buscando la portería rival”,

El entrenador de la SD Huesca apoyo a sus jugadores recalcando que “yo estoy contento con todo el mundo, porque la actitud es positiva, luego es verdad que las cosas te pueden salir peor o mejor”.

La lástima fue no poder ofrecer un buen resultado a los más de mil aficionados desplazados a Soria. “El agradecimiento es máximo, porque nos han dado el aliento que necesitábamos. La pena es que no les hemos podido dedicar la vitoria, por eso vamos a seguir trabajando para poder hacerlo el miércoles”.

Además quería lanzar un mensaje de optimismo y es que tiene confianza en el equipo, “porque tenemos talento y mucha gente que puede hacer daño. Hemos llegado con muchas acciones, pero no hemos tenido acierto. Si lo tenemos que intentar 1.000 veces, lo haremos”, indicaba.

Toca preparar el partido del miércoles con el Albacete donde es baja segura Raba que se lesionó en el hombro y estará un mes aproximadamente de baja. Mal momento porque vienen muchos partidos y todos los jugadores son necesarios en estas intensas tres semanas.