¡Que siga la fiesta!

El día 29 de este mes se entregarán en Huesca los premios Porc D'or. El sector porcino celebrará por todo lo alto el empobrecimiento del mundo rural gracias a su industria “insalubre, contaminante, nociva y molesta”, como define la normativa a las explotaciones de porcino intensivas.

Los vecinos y vecinas de la Comarca de la Hoya seremos espectadores mudos de un festín en el que se brindará con champán mientras en algunos de nuestros pueblos no tenemos agua potable por la contaminación por nitratos; se felicitará a un sector que nos ha “premiado” a todas las personas que vivimos en esta comarca contaminando con gases tóxicos, como el amoniaco y el ácido sulfhídrico, el aire que respiramos; se sacará pecho orgullosos de ser los mayores productores de carne de baja calidad al mismo tiempo que cada vez hay más zonas vulneradas por exceso de nitratos; y, como en cualquier fiesta, habrá risas, elogios, golpecitos en la espalda mientras las personas que queremos lo mejor para nuestros pueblos sufrimos viendo cómo en los últimos años disminuye el censo de población y aumenta el de cerdos, ¿quién quiere vivir en un pueblo sin agua potable en las casas, sin poder abrir las ventanas, con el paisaje plagado de naves, con baja calidad de vida?

A la gran bacanal se apuntarán muchos políticos que mirando para otro lado permiten que nos dejen los residuos destruyendo la riqueza de nuestra comarca. Y habrá más risas, más loas y más palabras grandilocuentes. Seguramente nadie en esa fiesta hablará de apoyar y apostar por modelos de ganadería extensiva, de pastos, ecológica, de la agricultura responsable, de la importancia de dotar a nuestros pueblos de servicios públicos de calidad y de la trascendencia del mundo rural.

Alguien hablará entre bocado y bocado de la riqueza que trae el sector y seguramente es cierto que algunos se están haciendo ricos, pero la mayoría no viven en nuestros pueblos ni tienen intención de pagar por lo que contaminan.

Triste ostentación de los privilegios de unos cuantos por encima de los derechos de todos.