Luis Felipe reivindica en su discurso el “aquí estamos todos y no sobra nadie”

En el acto de la entrega de la Parrilla de Oro el alcalde de Huesca, Luis Felipe, ha tomado la palabra en el discurso previo a las fiestas en el que ha destacado la importancia de seguir manteniendo vivas las tradiciones que tiene la ciudad y que la diferencian de otras. El primer edil tenía palabras para el hermanamiento de Tarbes del cual ha señalado que es piedra angular de todas las corporaciones que pasan por el consistorio y que a buen seguro “seguiremos manteniendo”. Pero Felipe ha querido tener espaciales palabras de cariño para reivindicar una Huesca viva que acoge a todos los hijos que se han tenido que marchar y vuelven para las fiestas

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También ha señalado que la ciudad tiene que seguir manteniendo viva sus tradiciones, que son la esencia de nuestra cultura. Unos días en los que “se demuestra que Huesca está muy viva”. También hablaba a los grupos folclóricos que recibían la Parrilla de Oro y señalaba que la jota y las fiestas son un dúo indisoluble y que sería impensable una fiesta sin el sonar de las guitarras y las voces de los joteros.

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Ha reivindicado que en Huesca nadie es forastero y menos para los hijos que vuelven en estos días tan especiales.

Por último ha agradecido la presencia en el Ayuntamiento del altoaragonés Félix Azón, director general de la Guardia Civil, a quien agradecía eligiera a Huesca como sede de sus actos centrales.