Meriendas al sol en la plaza de toros
Las gradas de sol de la Feria Taurina de la Albahaca son escenario de muchas sonrisas, carcajadas y anécdotas
Una vez concluida la Feria Taurina de la Albahaca, muchos oscenses y visitantes guardan el recuerdo de la diversión en las gradas de sol. La mezcolanza es la clave. Meriendas como pollo al chilindrón, paella, fidehua, pasta, salchichas con tomate, salmorrejo y, cómo no, rabo de toro conviven con bebidas y con la música de las charangas animando a moverse sin parar. Es el menú para pasar una tarde con altas temperaturas pero que a lo largo de todo el año solo se da en San Lorenzo. Por eso hay tantos que esperan estos momentos con impaciencia. Unos son muy aficionados a los toros, pero a otros lo que les atrae es la diversión y empezar a preparar la noche.
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Las edades son tan variadas como la indumentaria, que habitualmente incluye banderas como capa de superhéroe, gorro o sombrero, gafas de sol, un peluche como por ejemplo un mono que cuelga del cuello y grandes carros preparados para la ocasión donde llevar la degustación de la tarde. No se puede olvidar quien acude a estas gradas de sol de llevar hielo, porque sino los pases y figuras se hacen cuesta arriba.
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Los vítores cuando el torero o el picador aciertan en sus acciones se apoderan del público. Es lo que se llama ganarse a la plaza. Ahora bien, si fallan la gente hará constar la ‘faena’ con abucheos, arrojando latas o botellas o dando golpes en la grada o directamente poniéndose de espaldas al albero en señal de indiferencia. La Feria Taurina de este año organizada por Tauroemoción se vio en cierto modo empañada porque el gran plato fuerte que era el mano a mano de Ponce y el Juli contó con precipitaciones de lluvia a media tarde. Aun así, las gradas de sol se comportaron como si Lorenzo brillara radiante en el cielo.