Ocho comparencias en las Cortes de Aragón del Justicia.

La presencia del Justicia de Aragón también ha sido una constante durante este tiempo. Así, la institución que, en la actualidad, representa Fernando García Vicente ha comparecido en las Cortes de Aragón en ocho ocasiones, entre las realizadas ante el pleno y ante Peticiones y Derechos Humanos. De estas últimas, destacan las dedicadas a la problemática de los menores aragoneses y a la telefonía móvil.

Además del Justicia , cerca de una treintena de colectivos y entidades sociales han comparecido ante la Comisión de Peticiones y Derechos Humanos durante los dos últimos años, periodo en el que se han celebrado las veinticuatro sesiones de este órgano correspondientes a la V Legislatura de las Cortes de Aragón, cifra que supone, según los datos oficiales, un incremento respecto a anteriores etapas parlamentarias.

Este dato es fruto, entre otras cuestiones, de la política de acercamiento de la institución parlamentaria al tejido social aragonés, uno de los objetivos fundamentales planteados al inicio de la presente legislatura, además de corroborar la potenciación del trabajo de las diferentes comisiones, otra de las metas establecidas.

De esta forma, la Comisión de Peticiones y Derechos Humanos absorbe cerca del 40 por ciento de las comparecencias de agentes sociales y económicos a lo largo del periodo de tiempo sometido a estudio, en cumplimiento de las prescripciones reglamentarias, que sitúan este órgano como el escenario natural de las relaciones entre las Cortes de Aragón y la sociedad aragonesa. Al respecto, en la actualidad, se encuentran en plena tramitación otras doce solicitudes.

Como se recordará, el informe presentado por la Mesa de las Cortes de Aragón a principios de este mes, en el que se recogían los datos sobre la actividad parlamentaria en el ecuador de la V Legislatura, situaba en cerca de ochenta las asociaciones y colectivos aragoneses que han explicado sus postulados en el Palacio de La Aljafería. Otro aspecto que avala la intensa presencia de este tipo de entidades en la institución es su proximidad al número de comparecencias de miembros del Gobierno de Aragón, que se establece, hasta la fecha, en ciento siete.

Los representantes del tejido social aragonés que han trasladado sus reivindicaciones a los diputados autonómicos abarcan prácticamente todo el espectro ciudadano. Así, han pasado por las Cortes de Aragón los sindicatos más representativos, asociaciones que defendían los intereses de colectivos desfavorecidos, como gitanos o inmigrantes, así como otras entidades dedicadas a fomentar la solidaridad con otros pueblos y a defender los derechos de determinados sectores de la población como Intermón, Unicef o Cáritas, por citar algunos ejemplos.

No obstante, estas comparecencias tan sólo han sido una parte de la actividad de este órgano parlamentario. En este sentido, los representantes de los grupos parlamentarios en esta Comisión han aprobado un total de trece proposiciones no de ley, de las veintidós presentadas, cifra que arroja un porcentaje cercano al 80 por ciento de iniciativas de este tipo aprobadas, teniendo en cuenta que todavía se encuentran en pleno proceso de tramitación un total de cinco. El dato, en cualquier caso, habla bien a las claras del alto grado de consenso que ha presidido el debate político en Peticiones y Derechos Humanos.

La flexibilidad de las diferentes posturas políticas hay que buscarla, lógicamente, en las materias tratadas. De esta forma, los grupos coincidido en asuntos como la protección de la infancia y la adolescencia, la defensa de las poblaciones afectadas por conflictos bélicos o las diferentes iniciativas en torno a la cultura de la paz. En esta línea, se debe resaltar el importante incremento de propuestas en torno a los malos tratos y agresiones a mujeres.

Por último, ente las actividades más destacadas también cabe señalar las visitas realizadas a los centros penitenciarios de Daroca, Huesca y Zaragoza, así como los trabajos desarrollados por la ponencia de ?Paz para el pueblo saharaui?. (