Se busca al último oso que se soltó en el Pirineo. Balou no responde

Desde hace cuatro días, no se tiene ninguna noticia del oso Balou, el último plantígrado que se soltó en el Pirineo Francés, el pasado 1 de julio. El día 8 fue visto por última vez en Auribail, a una treintena de kilómetros de Toulouse. Sin embargo, en los últimos días no se ha recibido ninguna señal, ni de su collar con señal de radio incorporada y GPS, ni del microchip que tiene implantado. Desde el gobierno francés se asegura que, si se ha matado al oso, Europa retirará las ayudas al pastoralismo.

En las últimas horas, se habría sobrevolado la zona y se han realizado batidas buscándolo, sin resultado positivo. No se han hallado ni huellas, ni excrementos, ni pelos del animal.

Esto ha desatado la inquietud de la ministra de Medio Ambiente francesa, Nelly Olin, quien ha asegurado que si se confirmara que Balou ha sido asesinado, lo denunciarán y habrá una sanción muy importante para los culpables, si los encuentran. Además, si se diera el caso, deberían parar todo el programa de reintroducción de osos y renunciar a la última que estaba prevista, para dentro de unos días. De momento, van a esperar, y si Balou es encontrado sano y salvo, soltarán una última hembra.

Además, la ministra ha asegurado que ni la presión ni los métodos de los que se oponen a la seulta del oso no la hará echarse atrás. Olin ha mostrado sus dudas sobre la autoría de esta desaparición, desde el momento en que los pastores y ganaderos exhiben cadáveres de ovejas, presuntamente matadas por los osos, y al mismo tiempo, impiden a los expertos de la oficina nacinonal de caza que hagan la autopsia a esos animales.

La ministra de Medio Ambiente ha explicado igualmente que se corre el riesgo de que Europa corte las ayudas al pastoralismo si el oso Balou es encontrado muerto.

Quienes se oponen a la reintroducción del oso en el Pirineo niegan haber matado al animal. Sin embargo, no se olvida que hace unas semanas, se encontraron varios recipientes con miel y cristales.