El PAR insta al Gobierno de Aragón a saldar su deuda con los Hermanos de la Cruz Blanca
El Partido Aragonés ha presentado una proposición no de ley a la Comisión de Asuntos Sociales para que el Gobierno de Aragón salde su parte de deuda que se comprometió a pagar en la construcción de la nueva Casa Familiar de la Cruz los hermanos de la Cruz Blanca saldarán parte de su deuda de construcción.
El Gobierno de Aragón se había comprometido a financiar un tercio de la construcción, y para ello faltan por entregar 680.000 euros. Una deuda que ha ocasionado numerosos apoyos y movilizaciones por parte de la ciudadanía oscense.
El diputado del PAR por Huesca, Javier Callau, es el responsable de defender esta propuesta en la Comisión de Asuntos Sociales, y era Gerente del Instituto Aragonés de Servicios Sociales en el momento del compromiso con los Hermanos. Tras un tiempo en el que el IASS ha dado marcha atrás, Javier Callauya considera que el Gobierno de Aragón debe cumplir sus compromisos y lamenta la actual situación financiera en la que se encuentran los Hermanos de la Cruz Blanca de Huesca, derivada de las últimas fases de financiación del edificio. Callau afirma que “la solución que requiere la máxima urgencia debe ser satisfactoria y efectiva”.
El diputado del PAR ha querido recordar la labor que realizan estos hermanos y sus 200 voluntarios desde 1976, ya que “acogen y atienden en Huesca a personas de numerosos colectivos, desfavorecidos y desprotegidos, que carecen de recursos materiales o sociales y de salud física o mental” y calificaba sus servicios de una importante e imprescindible acción social y repercusión ciudadana.
En la exposición de motivos a la Comisión de Asuntos Sociales, se recordará que fueron los propios organismos públicos los que instaron a los Hermanos a trasladarse, ya que la antigua casa no podía conseguir las garantías que le exigía el Instituto de Servicios Sociales para concertar las plazas de los usuarios. El propio consistorio oscense cedió el terreno en el que está construida la nueva Casa, y tras estos apoyos, los Hermanos se decidieron acometer esta gran obra.
La financiación del Centro suponía más de seis millones seiscientos mil euros, que se debían pagar en tres partes, de más de dos millones cada una. Una a cargo del IASS, otra por parte de los propios Hermanos de la Cruz Blanca y la última procedente de donaciones de entidades financieras u otras iniciativas privadas (esta última ya saldada).