Calderón avisa de las dificultades que tiene el encuentro con el Alavés
El técnico, tras hablar de su renovación, analizaba el encuentro del sábado en Vitoria ante el Deportivo Alavés e indicaba que será un encuentro muy complicado dada la necesidad que tiene el conjunto vasco para seguir luchando por la permanencia. El Huesca llega con las bajas de Borrego y Rigo y con la vuelta de Sastre y Helguera y además se está pendiente de Roberto. El resto, en condiciones y con muchas ganas de certificar la permanencia este fin de semana.
Antonio Calderón indicaba que “tenemos un partido contra un rival que con toda seguridad se está jugando el ser o no ser en la categoría, quizás sea su última oportunidad, aunque luego queden 9 puntos. Si no consigue al menos puntuar y luego el Celta, que está más cercano, saca otro resultado se les puede complicar mucho. Eso nos tiene que indicar las dificultades que va a tener este partido”.
El entrenador oscense añadía que “vamos a tener enfrente un equipo que va a ir a por todas. Sabiendo esto, tenemos que poner lo que hay que poner y centrarnos en el trabajo que hay que realizar para solventar la papeleta y conseguir lo que necesitemos”.
La oportunidad de certificar la permanencia matemática es la ilusión que tienen todos en el Huesca: “Si conseguimos un empate o ganar será el punto que más alegría nos va a dar. Va a ser un punto como otro cualquiera, pero es poner el colofón a la salvación matemática, quizás sea el más significativo. Este año han sido de un valor importante por la dificultad que entraña la liga”.
La SD Huesca viaja a Vitoria con las bajas de Rigo y Borrego por sanción y Roberto por lesión. El delantero sigue fuera por una lesión en el soléo y por lo tanto se pierde el partido ante los vascos en el que está en juego la permanencia matemática en la categoría, el resto los habituales.
Hay bajas y vuelven otros jugadores por lo que durante la semana se ha trabajado con algunas variaciones en el once inicial para buscar el equipo más competitivo posible y saber jugar un partido que no será nada sencillo.