El agro altoaragonés prevé un año de buenas producciones pero, de nuevo, bajos precios en su venta

Las intensas lluvias de este invierno y el buen clima de esta primavera hace que la campaña de recolección se prevea buena. Valero Casasnovas, Presidente de la Cámara Agraria de Huesca, considera que 2010 será un año de producciones buenas, eso sí, la cantidad de kilos recogidos no se verá reflejado en los ingresos finales debido a los bajos precios que se perciben en el sector agrícola.

A la dificultad que entraña el mantenimiento de las explotaciones agrícolas hay que sumar las ganaderas, que, tal y como señala Casasnovas, sufren la crisis desde hace ya varios años. Los bajos precios no solo afectan a la agricultura, sino que la ganadería ha visto cómo caían en picado los precios de sus productos en los últimos tiempos.

Otro problema al que apunta es que tras invertir en la transformación de regadíos, el problema que tienen es que el pago de la potencia eléctrica les resulta prohibitivo. Casasnovas añade que no en el mes de mayo, muchos agricultores están dudando si comenzar una segunda cosecha para esta temporada porque no les resulta rentable.

Además, Valero Casasnovas señala respecto a las obras hidráulicas, que están igual que hace unos años, y que si las obras pendientes no se van a hacer, que lo digan. En el Canal de Aragón y Cataluña, los regantes están muy esperanzados con las obras de construcción del embalse de San Salvador. En Riegos del Alto Aragón se insta a la pronta ejecución de los embalses de Biscarrués y Almudévar.

Estas dificultades han hecho que el mundo del campo celebrara San Isidro en medio de un clima de desánimo y ha llevado a las organizaciones agrarias (ASAJA, UAGA-COAG y UPA) a amenazar con salir de nuevo a la calle tras las movilizaciones de noviembre de 2009. En esta ocasión, la razón sería que, a su entender, no se han adoptado medidas efectivas de apoyo al sector primario.

Por otra parte, el medio rural altoaragonés está pendiente de la aplicación de la Ley de Desarrollo Sostenible, que supondrá la inversión en los próximos años de 188 millones de euros en Aragón.