El grupo folclórico San Lorenzo, apuesta por la modernidad sin abandonar la tradición en la jota

La primera de las actuaciones folclóricas en el parque Miguel Servet, corría a cargo este día 10, del Grupo Folclórico San Lorenzo, en el día del patrón. Un año más, gustaron mucho, principalmente por la novedad de su puesta en escena. En esta ocasión, de nuevo, el grupo sorprendió por su innovación y por la nueva filosofía que le han imprimido, reconociendo que el folclore ha ido evolucionando a lo largo del tiempo, tanto en romanzas, jotas cantadas y coreografías, como en las músicas, ritmos e instrumentos. Por ello, en la segunda parte del festival, ofrecieron dos piezas mostrándose tal y como son hoy en día, con escenografía totalmente actual, dándole la importancia que se merece a la jota de nuestra tierra.

Ello, sin olvidar que el Grupo San Lorenzo, ha estudiado bailes, danzas y músicas, que han trasladado a los escenarios de pueblos y ciudades con el mayor respeto y bajo cuidadas puestas en escena, siempre documentadas.

Alrededor de 35 personas participaron en la tradicional actuación de este grupo que fue fundado en 1996, bailando diferentes piezas y con el canto de jotas de estilo o de dúos entre baile y baile. Toda la actuación, con apenas presentaciones, se desarrolló totalmente entrelazada. Comenzaron con el baile de la Jota de Albalate, a cargo de dos niños, al que siguieron los bailes del Bolero Najino, de la Jota del Primero de Mayo y del Bolero de Caspe, seguida de la Jota triste o de la Jota de Calanda.

Precisamente, a partir de la interpretación de la Jota Triste, colaboró con el grupo el pianista Quique Escartín, acompañado por la rondalla, bandurrias y laúdes. También se bailaron la Jota de Calanda o la Dolores "Hoy".

Dentro del canto, se interpretaron estilos individuales, con letras alusivas a San Lorenzo y a las fiestas, y con estilos populares, como la Habanera de Ejea y Águilas de Aragón, ambas con letra alusiva, La Magallonera, o S'Ha feito de nuey.

Como broche final, el Grupo se despidió con la Jota de San Lorenzo que, como ya es tradicional, llevaron al parque vestidos de blanco y verde.