Deudas preocupantes, pero no alarmantes, en Ayerbe y Almudévar

Apenas queda una semana y media para que finalice el plazo que tienen los ayuntamientos para presentar, antes del 15 de marzo, el listado de facturas pendientes de pago con los proveedores. Y en ello se encuentran inmersos los consistorios de Almudévar y Ayerbe, dos de las localidades más importantes de la comarca de la Hoya de Huesca. La deuda contraída podría rondar el medio millón de euros, en el primer caso, y entre 300.000 y 350.000 euros, en el segundo.

Unas cifras “preocupantes, pero no alarmantes”, según el alcalde de Almudévar, Antonio Labarta, que valora positivamente el Real Decreto promulgado por el ejecutivo central, a través del cual se pretende conseguir que, a largo de este año, se pague la integridad de las deudas que las administraciones locales tienen con sus proveedores.

Para el alcalde de Ayerbe, Carlos Marco, esto supondrá un balón de oxígeno para las empresas y evitará que muchas echen el cierre. También supondrá un alivio para los ayuntamientos, pendientes por otra parte de conocer las condiciones de la concesión de créditos y los plazos establecidos por los bancos para su devolución.

En ambos casos la mayor parte de las deudas contraídas están relacionadas con los servicios prestados por diferentes gremios o con mejoras en infraestructuras, cuyo coste no pudo asumir en su momento el consistorio. Muchos de los pagos pendientes llevan hasta tres años de retraso.

Son tiempos difíciles en los que es necesario buscar la estabilidad presupuestaria y “apretarse el cinturón”, sin dejar de prestar los servicios básicos a los ciudadanos. Y todo ello en un momento en el que los ingresos a las arcas municipales disminuyen y gastos del día a día impiden hacer frente a las deudas acumuladas.

El municipio de Almudévar cuenta, en la actualidad, con una población de 2.650 habitantes (incluidos los vecinos de Valsalada, San Jorge y Artasona), cuyo presupuesto para este año rondará los 2,4 millones de euros. Por su parte, Ayerbe tiene un censo de unas 1.120 personas, y un presupuesto cuya cifra asciende a más de un millón de euros, pendiente de su aprobación en el pleno de este mes de marzo.