Los grausinos se van de romería

Graus celebra, este martes, su tradicional romería a la ermita de San Pedro. Centenares de grausinos pasarán el 1 de mayo en el cerro donde está situada la ermita para disfrutar de paellas, conejo con caracoles y ajaceite (el plato tradicional) y carne a la brasa. En este 2012, desde la Cofradía de San Pedro de Verona se hacen tres llamamientos: tener mucha precaución con el fuego, ser cívico y recoger toda la basura que se genere, y colaborar con la propia cofradía para que esta romería, tal y como la conocemos hoy en día, se pueda celebrar durante muchos años más.

A pesar de que los más jóvenes ya suelen subir la noche de antes para alargar la jornada romera, la gran mayoría de los grausinos subirán el martes por la mañana hasta esta ermita. Lo harán, bien andando, por los dos caminos con los que se cuenta y como se iba tradicionalmente, bien en coche.

Una vez ahí, a las 13.00 tendrá lugar la procesión con el santo en la que tiene lugar la bendición de los términos, acto en el que se bendicen las tierras de los cuatro puntos cardinales. Tras ella, llegará la misa campestre y el reparto de torta y vino.

Tras la comida, son los propios miembros de la cofradía los recorren, acompañados de la charanga, los diferentes grupos de amigos. La intención, además de llevar la música a todos los rincones del cerro es repartir los números de la rifa posterior para poder pagar los gastos de la romería con el dinero recogido. José Antonio Frégola, prior de la cofradía insiste en la importancia de colaborar con la compra de estos números.

Y una vez que el sol se vaya poniendo, la fiesta se trasladará hasta el parque del Torroc. El año pasado, se tomó la decisión de recuperar una antigua tradición, el baile en la Piedra Plana. Al desaparecer este lugar, el baile desapareció y, este año, tras el éxito de la pasada edición, se repetirá para que la gente pueda continuar la fiesta y para que los que no han podido subir a la ermita, puedan disfrutar también de esta celebración.

Desde la cofradía insisten de que, en la medida de lo posible, se haga uso del fuego de la explanada de la ermita, el único legal, aunque entienden que cada grupo realice el suyo. Sí que piden, respecto a este asunto, mucha precaución para que se pueda disfrutar de una jornada romera sin incidentes.

Todo indica que la construcción de esta ermita vino determinada por la presencia, años atrás, de un convento de Dominicos, orden a la que perteneció San Pedro Mártir.