Un sendero en la Ribagorza para todo el mundo

Ya está en marcha el sendero accesible al Mirador de Isábena que se encuentra en el Alto de Bonansa. Se trata de una ruta creada para que todo tipo de personas puedan pasear por él aunque tengan una discapacidad física o sensorial. De momento se ha realizado una primera fase, subvencionada a través del Plan de Competitividad Turística, aunque se espera que a final de año se pueda contar con el segundo tramo, una actuación de la que se encargará la Diputación Provincial de Huesca.

El sendero se encuentra entre los términos municipales de Bonansa y Laspaúles. Cuenta con un aparcamiento con varias plazas para personas en silla de ruedas y a lo largo de los 300 metros con los que cuenta en la actualidad, se pueden encontrar siete paneles informativas traducidos también al braille y zonas de descanso con bancos y mesas adaptados.

Javier Betorz, presidente de la comisión de Promoción, Desarrollo y Medio Ambiente, anunciaba que la previsión es que la segunda fase de este sendero, que dará acceso al mirador, estará finalizada antes de que acabe el año.

Explicaba que desde la Diputación se está trabajando en este tipo de senderos – ya hay uno en Bielsa y otro en Biescas – a lo que se va a unir un nuevo proyecto que potencie la accesibilidad a diferentes miradores en la provincia. De ellos, dos estarán en la Ribagorza.

Se trata de una de las últimas acciones del PCT y por ello el presidente de la Comarca de la Ribagorza, José Franch, aprovechaba la oportunidad para reiterar la buena relación que ha existido, desde el principio, con todas las administraciones implicadas en este plan, además del buen entendimiento existente con la diputación para poder llevar a cabo la totalidad de este sendero.

Resaltaba, además, las actuaciones que se han estado realizando en el Valle de Isábena como el área de descanso en el parking de Obarra o la presencia de oficinas de turismo.

También estaba presente el alcalde de Bonasa, Marcel Iglesias quien manifestaba su satisfacción porque todas las personas, con o sin discapacidad, puedan disfrutar del Pirineo y, en concreto, de la Ribagorza.