Graus se prepara para recibir la caravana de la vuelta ciclista España

El 9 de septiembre saldrá desde Graus la decimosexta etapa de la vuelta ciclista a España, de 146.8 kilómetros, con final en la estación de esquí de Formigal. Será el punto de partida de la tercera y última semana de vuelta y la despedida del pelotón de tierras aragonesas con una etapa, quizás la menos exigente de las tres jornadas pirenaicas, pero en la que, previsiblemente, el cansancio comenzará a hacer mella en las piernas de los ciclistas.

Para Graus, albergar esta cita es un hecho histórico, porque se trata, posiblemente, del evento más importante celebrado nunca en la villa ribagorzana por el volumen de gente que mueve y la organización del mismo. De hecho, Roberto Riverola, director técnico del PMD de Graus explicaba que ha habido que preparar una superficie de entre 12.000-14.000 m2 para albergar la caravana de la vuelta.

El día 9 desde las 7 hasta que salga la vuelta, el acceso norte a Graus permanecerá cerrado. Las restricciones de tráfico afectarán a las calles Avenida Pirineos, Miguel Cuervo, calles Cotiella y Turbón, y Paseo Ribagorza donde quedará instalado el punto de paso obligatorio, la zona de aparcamiento de los autobuses de los equipos, el control de firmas, la caravana de carrera, y la zona VIP que estará ubicada en el campo de fútbol.

La salida lanzada será desde Las Ventas de Santa Lucía, en la A139, pero antes habrá un recorrido neutralizado, de 9 kilómetros, por las calles de Graus, que afectará a Avenida Pirineos, Ángel Samblancat y Paseo del Ésera, zonas que deberán estar libres de vehículos.

Está previsto que el equipo de montaje de la salida llegue el domingo 8 alrededor de las cinco de la tarde, por lo que, también durante un par de horas, se cortará el tráfico, en la zona deportiva, de manera que se pueda facilitar al personal esa faena.

Eta cita deportiva generará en la villa problemas importantes de aparcamiento por lo que se pide la comprensión y colaboración de los vecinos y se les invita, ese día, a dejar el coche en casa y disfrutar, del espectáculo de la vuelta ciclista.