Azajer atendió a 131 ludópatas en 2012
La Asociación Aragonesa de Jugadores de Azar en Rehabilitación atendió durante el pasado año a 131 ludópatas.
De ellas, 68 tenían adicción al juego; 12 al alcohol; 8 a drogas; 12 a juego y alcohol; 10 a juego y drogas; 6 a alcohol y drogas; 5 a juego, alcohol y drogas y 10 a otras conductas adictivas.
De los 131 casos descritos, 31 lograron su rehabilitación y 70 continúan el tratamiento terapeútico, mientras que 30 personas decidieron abandonar. Igualmente, la Asociación atendió a 154 familiares de ludópatas.
CONVENIO CON EL GOBIERNO DE ARAGÓN
El consejero de Política Territorial e Interior, Antonio Suárez, ha firmado un convenio con la Presidenta de la Asociación Aragonesa de Jugadores de Azar en Rehabilitación (AZAJER), Esther Aguado, con el objeto de desarrollar actividades de prevención e información sobre los riesgos que conlleva la adicción al juego.
El convenio, dotado con 24.000 euros, prevé las siguientes líneas de actuación:
La organización conjunta de campañas informativas y preventivas, fundamentalmente en centros sanitarios y educativos, dirigidas a la población en general, con la finalidad de desincentivar hábitos o conductas patológicas.
La Campaña del Día sin Juego en Aragón.
La jornada de “Sensibilización en el Juego Responsable”, dirigida a todos los sujetos involucrados en el juego en Aragón: la industria del juego, los reguladores y su inspección, las asociaciones de ayuda contra la adicción al juego, los centros de tratamiento de esta adicción y los centros de investigación y estudio del juego desde una perspectiva social y económica.
En concreto, la Ley 2/2000, de 28 de junio, del Juego de la Comunidad Autónoma de Aragón, establece que la actividad del juego se ordenará de acuerdo a los siguientes principios:
Evitar la incentivación de hábitos y conductas patológicas.
Promover la protección de los menores de edad y de las personas que tengan reducidas sus capacidades volitivas, impidiendo su acceso a determinadas prácticas y locales de juego.
Ponderar las repercusiones sociales, económicas y tributarias derivadas de la actividad del juego.
Reducir, diversificar y no fomentar su hábito e impedir en su gestión actividades monopolistas.