La tradición cumple de nuevo con el homenaje a la cuna de San Lorenzo

Un año más la cofradía de Loreto celebraba el homenaje a la cuna de San Lorenzo consiguiendo reunir a cientos de oscenses. Este acto es uno de los más destacados del pórtico Laurentino y quiere ser una cita en la que se recuerde que el patrón se la ciudad y toda su familia eran oscenses. Tras la misa, oficiada este año por el Obispo de la Diócesis de Huesca, se repartían 800 raciones de pan de San Lorenzo.

La ermita de Loreto acoge desde 1997 este homenaje a la cuna del santo porque es allí donde la tradición oscense cree que nació San Lorenzo. Este año la misa estaba oficiada por el Obispo de la Diócesis de Huesca, Julián Ruiz, en un momento clave para Loreto, puesto que todavía debe pasar la ITE (Inspección Técnica de Edificios) y conseguir los fondos necesarios para hacer las obras que así lo garanticen. El prior de la Cofradía, Santiago Pardo, explica que urge retejar todo el techo. De los 42.000 euros necesarios, han conseguido 22.000 gracias a la solidaridad de los oscenses y a una aportación de la Diócesis. Esperan que para la celebración del año que viene Loreto ya esté en condiciones.

La Real Cofradía de Loreto y San Lorenzo se encarga de este tradicional acto en el pórtico Laurentino. En él, las peñas, los barrios y las cofradías realizan una ofrenda de flores y frutos. Las mairalesas son las encargadas de llevar al altar las cestas de la ofrenda llenas de frutos típicos de la huerta oscense en agosto: melocotones, tomates y otras hortalizas. Hay quien opta por legumbres, también de la zona, estas cestas luego son donadas a centros de ayuda social de la ciudad. Además de los frutos, la albahaca impregna con su olor la ermita y también se ofrecen dulces de repostería.

En el homenaje a la cuna de San Lorenzo, como cada año, la peña Os Casaus acude de forma masiva y se encarga de inaugurar la temporada de “blanco y verde” vistiendo el atuendo peñista.

Parte de la corporación municipal también asiste a este acto religioso. El equipo de gobierno estaba representado por el alcalde de la ciudad, Luis Felipe. Participaban también varios concejales del PP y el portavoz de Ciudadanos.

Tras la misa, se repartían 800 raciones de pan de San Lorenzo. La coral de Santo Domingo era la encargada de traer la música a éste acto del pórtico Laurentino.