Viva Huesca, Viva San Lorenzo

La Plaza de la Catedral como todos los años se ha quedado pequeña para acoger a las miles de personas que han disfrutado del inicio de las fiestas de San Lorenzo con el disparo del cohete. En esta ocasión los encargados de prender la mecha han sido los componentes del grupo de rescate EREIM de la Guardia Civil. Desde ese momento la ciudad entera se ha vestido de verde y blanco. Todo con la única intención de disfrutar de siete intensos días de fiesta.

Desde primeras horas de la mañana el ambiente se ha dejado notar por todos los rincones de la ciudad. Los tradicionales almuerzos han reunido en bares y terrazas a miles de personas. Desde los clásicos huevos con….. al bacalao, toro y como no podía faltar pollo a lo chilindrón. Todo es bueno en estos días para asentar el estómago ante los posibles “excesos”.

En la Casa Consistorial, emociones de todo tipo en los momentos previos a la fiesta. Especialmente con la imposición de la Parrilla de Oro de la comparsa de gigantes y cabezudos. En un momento emocionante para ellos, para un actor importante de la fiesta y que lleva más de 350 años a sus espaldas.

El alcalde de Huesca, Luis Felipe, en su discurso, no se ha querido olvidar de una fecha especial. Y ha recordado que la capital oscense hace 20 años guardó silencio tras lanzar el cohete por todo lo ocurrido en la riada de Biescas. Una imagen que nada ha tenido que ver con la de este año.

Además, también ha querido agradecer el trabajo que el EREIM realiza día tras día para hacer más seguras las montañas del Pirineo.

Para cerrar el discurso Luis Felipe ha apuntado que la ilusión para el año próximo sería recordar a los “oscenses en la diáspora” que vuelven a la ciudad para disfrutar de San Lorenzo.

Llegaba entonces el momento del pequeño pregón de la concejala de fiestas, María Rodrigo, y el lanzamiento del cohete anunciador que marcaba el inicio de las fiestas de San Lorenzo 2016 a cargo de los miembros del EREIM, muy satisfechos con la responsabilidad de ser los lanzadores en reconocimiento a la gran labor que realizan en los rescates de montaña, doble satisfacción por haber sido elegidos por votación popular.