Actualidad

Cuenta atrás para el gran Carnaval de Bielsa

Los vecinos de Bielsa aceleran los preparativos para celebrar su fiesta más característica: el Carnaval. La localidad sigue cosiendo los trajes de los personajes de este festejo las trangas, los onsos, los domadores, la agüeleta o el caballé, entre otros. El último fin de semana de febrero la diversión volverá a estallar en esta localidad sobrarbense con el protagonismo este año de las madamas, que son la imagen del cartel. Desde el punto de vista económico esta fiesta tiene una gran relevancia para la zona porque atrae a entre 3.000 y 5.000 personas cada año.

Ni siquiera los habitantes del pueblo conocen el origen de la tradición del carnaval de Bielsa. Un evento arraigado entre sus vecinos que, ni cuando estaba prohibido, dejó de celebrarse. Mantienen las señas de identidad que lo caracterizan y han modernizado muchos aspectos a lo largo de los años.

La ronda por las calles del pueblo con todos los personajes de este festejo, congrega a autóctonos y visitantes. Las trangas son los personajes más afamados, pero en el pueblo reivindican en esta ocasión la figura de las madamas.

Las madamas llevan un traje distinto cada día. Vestidas de blanco con cintas de colores representan la pureza. Es de confección totalmente artesanal y cada elemento se monta cada día. Antes de la ronda las madres pasan horas cosiendo y preparando peinados. Es una experiencia que ninguna joven del pueblo se quiere perder.

Y al salir en la ronda las trangas les roban el protagonismo en la plaza. Son personajes míticos, mitad humanos y mitad animales, símbolos de virilidad y fertilidad. Se visten con la piel y los cuernos de un macho cabrío, llevan la cara pintada de negro y avisan de su llegada con enormes cencerros. Este sonido es sinónimo de miedo, al igual que los fuertes golpes que atiza el domador al “onso”. El animal sale de su letargo invernal y es símbolo de fuerza y naturaleza. Andando a cuatro patas y a empujones se hacen paso guiados por los domadores, que los llevan atados con cadenas. Bielsa siempre ha mantenido con orgullo una tradición que cada año atrae a miles de visitantes de fuera del valle.

La afluencia durante esos días es superior a 3.000 personas para disfrutar a esta gran fiesta. El público es muy fiel con elementos tan característicos como por ejemplo los personajes o la quema de Cornelio Zorrilla, el muñeco de paja y trapo que representa al Carnaval y que contempla toda esta fiesta desde del balcón del Ayuntamiento, donde fue colgado tras el juicio que marca el inicio de la celebración.

Las trangas, personajes míticos mitad humanos y mitad animales, son símbolos de la virilidad y la fertilidad. Los jóvenes solteros del valle son los encargados de dar vida a este personaje que se viste con la piel y los cuernos de un macho cabrío, llevan la cara pintada de negro y avisan de su llegada con enormes cencerros.

Las madamas son las jóvenes solteras que son recogidas al pasar la ronda por la puerta de su casa. Vestidas de blanco con cintas de colores representan la pureza.

El oso u “onso” anuncia la próxima llegada de la primavera. El animal sale de su letargo invernal y es símbolo de fuerza y naturaleza. Los hombres que los representan van embutidos en enormes sacos rellenos de hierba seca y cubiertos con piel de ovejas. Andando a cuatro patas y a empujones se hacen paso guiados por los domadores, que los llevan atados con cadenas.

Otro personaje fundamental de este carnaval es Cornelio. Un muñeco relleno de paja que es juzgado por ser el responsable de todos los males ocurridos en el valle y condenado a la hoguera.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00