‘El cierre de la carretera se ha solventado con paciencia de usuarios y vecinos’

Este martes volvían a circular vehículos por la N-260, entre Campo y Seira, tramo que ha permanecido cerrado durante dos meses, a excepción de los fines de semana que han coincidido con puente festivo, para poder avanzar en la obra de mejora y acondicionamiento de este eje. Está previsto que el próximo cierre pueda tener lugar entre el 14 y el 17 de diciembre para realizar voladuras con motivo de poder abrir las bocas de los túneles.

Eusebio Echart, vicepresidente comarcal y alcalde de Campo, explicaba que el cierre se ha hecho muy largo por la vuelta que tenían que dar quienes accedían o salían del valle de Benasque. Había ganas de reapertura y de ver los avances, añadía.

El edil indicaba que al haber coincidido con temporada baja y además con las restricciones en la movilidad motivadas por la pandemia, quienes más han sufrido el cierre de la carretera han sido para los propios vecinos del territorio que han tenido que circular por la A-1605 (eje del Isábena) para entrar y salir del valle.

Añadía Echart que, con lo que se ha luchado para que comenzaran las obras, se asumen las molestias que la obra pueda ocasionar. Hablaba de futuros cortes, más breves, en un futuro inmediato, y que coincidirán con nuevas voladuras.

Durante los dos meses de cierre se ha ejecutado parte de la cimentación de los voladizos, mediante micropilotaje, necesarios para ampliar la carretera por la margen derecha de la calzada, realización de desmontes, comienzo de los emboquilles de los túneles proyectados mediante voladuras o ampliación de la calzada en el tramo comprendido entre la presa de Argoné y Campo.