Actualidad
somontano

Los barbastrenses cumplen “por responsabilidad” con la obligatoriedad de llevar mascarilla

Los vecinos de Barbastro son conscientes de la importancia de la medida, y a pesar del calor, cumplen con su obligación

Los vecinos y vecinas de Barbastro cumplen sin rechistar y por responsabilidad con la obligación de llevar mascarilla en los espacios públicos, al aire libre y en plena vía pública sin tener en cuenta la distancia de seguridad. Desde este martes se extiende el uso de la mascarilla, un elemento que antes sólo era reconocible para el sector sanitario o en algunas empresas que utilizaban materiales tóxicos o perjudiciales.

Ahora se hace obligatorio su uso, con multas de 100 euros para aquellos que no cumplan con la norma, que poco a poco va conquistando territorios en otras comunidades autónomas. Las hay quirúrgicas, las azules y blancas, las que hay que llevar por el lado más oscuro, las hay mucho más profesionales, con materiales más duros y sistemas de filtración del aire que utilizan aquellas personas que por su actividad profesional así lo precisan. Las hay de tela, que como la moda, se imponen.

Este año la tendencia en las mascarillas de tela es “lleva la que te guste, la que te vaya mejor”. Muchos son los que tienen más de una, para intercambiar sabiendo que este sistema de seguridad, al margen de ser obligatorio, cuida a la persona que la lleva. Con los cordones rectos o doblados en los lóbulos de unas orejas que no hacen oídos sordos a una realidad que se impone, se llama nueva normalidad.

Los vecinos de Barbastro así nos lo cuentan. GENTE MASCARILLA

La mascarilla se convierte en un elemento más del uniforme de trabajo para aquellas personas que están de cara al público. Ni el calor ni las largas jornadas laborales hacen mella en los trabajadores que entienden que es lo mejor para el bien común. Se libran los que tengan un despacho o espacio propio.

Escuchamos a aquellos que trabajan con todas las medidas de seguridad. MASCARILLA TRABAJADORES

Algunas son las excepciones. Las personas con alguna enfermedad o que tengan algunos problemas para respirar y que la mascarilla pueda agravar su estado de salud no tienen por qué utilizarla. Tampoco es necesario en aquellas personas que por una situación de dependencia o por diversidad funcional el uso de la mascarilla sea inviable.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00