Melchor, Gaspar y Baltasar son recibidos con mucha ilusión por los niños

Las calles de los municipios ribagorzanos no se llenaban este martes de gente para dar la bienvenida a los Reyes Magos porque sus majestades eran recibidos sin cabalgatas y sin música pero con mucha ilusión y cariño por parte de los niños que, a pesar de las restricciones motivadas por la covid-19, podían ver a Melchor, Gaspar y Baltasar gracias a las fórmulas que habilitaban los Ayuntamientos.

En el caso de Graus, los Reyes Magos, llegaban, directamente al centro recreativo. En la pista de verano se colocaba un escenario con los tronos de sus Majestades y también el belén viviente y se establecía un circuito para evitar aglomeraciones y que, al mismo tiempo, los niños pudieran ver a Melchor, Gaspar y Baltasar. Para ello, se establecían diferentes franjas horarias en función de las edades y era necesario apuntarse en la oficina de turismo.

Los primeros en poder ver a los Reyes eran los niños más pequeños de o a 3 años, a continuación los de 4-6 años, seguidos de 7-9 años y 10-12 años y, a partir de las 20 horas, llegaba el turno para el resto de personas.

El patio del Palacio de los Condes de Ribagorza era el escenario en el que los Reyes Magos atendían a los niños de Benasque, tras su llegada al municipio por el Portillón. Este año era Gaspar el encargado de dirigirse a los niños para desear que pronto podamos salir de la actual situación, que se acabe la pandemia y que tengamos un feliz 2021.

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En Benabarre sus Majestades recorrían algunas calles aunque lo hacían sin paradas, sin dar caramelos, y sin entregar regalos directamente a los pequeños pero manteniendo intacta, con su presencia, la ilusión de la noche más mágica del año.

En otros municipios como Montanuy y Bonansa, también la visita de los Reyes Magos era esperada con mucha ilusión por parte de niños y mayores.

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